El cableado y las redes de suministro que están desplegadas bajo tierra conforman una pieza fundamental para el desarrollo de proyectos de inversiones públicas y privadas y también para el acceso de la ciudadanía a todos los servicios digitales, como la telefonía o la televisión digital . Por este motivo, el Gobierno andaluz ha planteado una primera estrategia de coordinación y mejora de todas estas infraestructuras a través de un aprobado en el Consejo de Gobierno y que se enmarca dentro del plan Andalucía Digital. El primer gran reto que pretende afrontar este plan es la enorme brecha digital existente en el territorio andaluz con una enorme distancia entre los servicios que reciben grandes ciudades y la conectividad en pequeños municipios. Esto no sólo es una herramienta para la mejora de la calidad de vida sino que es un instrumento de trabajo fundamental y una de las medidas que pueden contribuir a frenar la despoblación de determinados núcleos rurales. El nuevo plan establece una batería de medidas para favorecer la llegada a todos estos municipios rurales de la red 5G, en primera instancia, así como la de los últimos avances en televisión digital de alta definición. Para ello, se plantean iniciativas como que todas las obras que se realicen en carreteras prevean la reservas de zanjas para las conexione s y especialmente el uso compartido de infraestructuras de dominio público entre las distintas compañías suministradoras. «Se trata de fomentar el uso compartido de infraestructuras tales como los tubos por los que transcurre el cableado de los operadores y de aprovechar al máximo la ejecución de obras civiles para que tengan reservado espacio para redes de comunicación», apuntó el consejero de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, quien subrayó que el objetivo último de este plan es mejorar el acceso de la ciudadanía a los servicios: « Si queremos disfrutar de una televisión en alta resolución, tener redes de telecomunicaciones veloces y con suficiente capacidad necesitamos modernizar nuestras infraestructuras digitales , sector en el que los cambios avanzan a un ritmo frenético», apunta Sanz. El segundo de los retos de las redes de infraestructuras es resolver el enorme desajuste existente en el subsuelo entre las distintas redes e insfraestructuras de servicios que se han ido instalando de forma independiente por las empresas suministradoras. El complejo entramado existente bajo tierra retrasa e incluso llega a frenar proyectos dado que falta información y la que hay está actualizada. La Junta de Andalucía plantea resolver esta situación con el desarrollo de un mapa de todas las infraestructuras de telecomunicaciones, a través de una plataforma digital a la que tengan acceso además todos los ayuntamientos de forma que puedan compartir información y usarla como una herramienta básica de planificación y de gestión de permisos y autorizaciones. Las empresas podrán acceder a este documento con un punto de información y se habilitará una sede electrónica en materia de infraestructuras digitales que funcionará a modo de ventanilla única a disposición de los agentes públicos y privados que quieran desarrollar un proyecto. El I plan de impulso de las infraestructuras digitales se enmarca dentro de la Estrategia Andalucía Digital que se promueve desde la Consejería de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa. «Se trata de colocar a la Administración andaluza como actor en las tareas de fomento y ordenación del despliegue de infraestructuras digitales y para definir las actuaciones para impulsar el desarrollo de un ecosistema de infraestructuras digitales que disponga de enlaces de comunicaciones troncales y centros de datos de gran capacidad», concluye el titular del área, Antonio Sanz.