Alivio en el PSOE porque Irene Montero no sea vicepresidenta del Gobierno
El fracaso de la investidura de Pedro Sánchez ha dejado un sabor agridulce en el PSOE. En Ferraz y sedes del partido de toda España se lamentan por “la oportunidad perdida”. No obstante, y teniendo en cuenta las exigencias que planteó Podemos, importantes dirigentes socialistas aseguran que “mejor no tener Gobierno al que íbamos a tener”.
Esta afirmación recuerda, de hecho, a la que realizó Pedro Sánchez el pasado jueves, respondiendo a la amenaza de Iglesias de que jamás sería presidente si hay repetición electoral: “Si para ser presidente tengo que renunciar a mis principios, si tengo que formar un Gobierno a sabiendas de que no será útil a mi país, entonces usted está en lo cierto. Yo no seré presidente ahora”.
Los altos cargos del PSOE consultados por Confidencial Digital extraen la misma conclusión que el secretario general: “Hay necesidad y urgencia de que haya un gobierno con plenos poderes, pero no podíamos aceptar la coalición a cualquier precio que nos planteaban desde Podemos”.
“Mejor no tener a Montero de vicepresidenta”
En ese sentido, una de las “buenas noticias” que, a juicio de altos cargos del PSOE deja la no investidura es que, de esta manera, “no tendremos a Irene Montero como vicepresidenta del Gobierno durante cuatro años”.
Desde el PSOE aseguran que ese nombramiento fue “condición sine qua non” de Podemos simplemente para sentarse a negociar, tal y como planteó Pablo Echenique a Carmen Calvo en la tarde del sábado, 20 de julio.
La número dos del Ejecutivo aceptó esa exigencia con el objetivo de lograr un acuerdo que desbloqueara la investidura. Pero, tras el fracaso de las negociaciones, la conclusión es clara: “Es un alivio que eso no prosperara”.
Entre otras cosas, apuntan los dirigentes socialistas contactados por ECD, porque esa designación hubiese provocado un “preocupante precendente”. En concreto, “se habría transmitido el mensaje de que se puede llegar a vicepresidenta sin tener ningún tipo de experiencia profesional y por un simple chantaje”.
La “bandera” del PSOE
Además, en el PSOE también se valora que el partido, con la investidura frustrada, no haya cedido a Podemos, y a la “vicepresidenta Montero”, una de las banderas históricas del PSOE: la de la igualdad y el feminismo.
En este sentido, se recuerda que la vicepresidencia que iba a ostentar Irene Montero se encargaría de la coordinación de todas las competencias de Igualdad, unas atribuciones a las que tendría que haber renunciado Carmen Calvo.
La actual número dos del Ejecutivo, de hecho, presentó oposición, en un principio, a esa cesión, aunque la acabó aceptando para intentar llegar a un acuerdo con Podemos. Ahora, en el PSOE se felicitan: “Buscaban quedarse con una de nuestras señas de identidad”.
La apuesta por la vía portuguesa
Podemos, además, “también exigió el Transición Energética y las políticas sociales”, por lo que “pretendían quitarnos la esencia de todos los gobiernos socialistas” y de éste en particular, definido por Sánchez como “feminista, ecologista, europeísta y social”.
Por todo ello, las fuentes consultadas concluyen que “no ha sido una mala noticia” no formar un gobierno de coalición como el que exigía Podemos, sino “una oportunidad”.
En ese sentido, desde el PSOE ven ahora “razonable” un gobierno monocolor con un acuerdo de investidura con Podemos, tal y como están exigiendo a Pablo Iglesias desde IU, Anticapitalistas y En Común: “La vía portuguesa está más vigente que nunca”.