Patrick Lange, un hombre de hierro único

Si hay algo que caracteriza al triatlón es la oportunidad que da para pulverizar obstáculos. Ayer, Patrick Lange no solo consiguió ganar su segundo Ironman de Hawái consecutivo. También se hizo un hueco en la historia al ser el primer hombre que consigue hacer la prueba más dura de larga distancia en menos de ocho horas. El alemán se tomó el certamen con calma, sin hacer ruido y gestionando sus energías. Afrontó la última parte de la cita con más de seis minutos de desventaja respecto al primer clasificado, el australiano Cameron Wurf. Fue a falta de 25 kilómetros para la conclusión del recorrido a pie cuando tomó la cabeza de la carrera e imprimió un ritmo que le permitió coronarse como el nuevo hombre de hierro. No se quedó ahí su espectáculo, pues el germano aprovechó el éxtasis de la ocasión para pedir matrimonio a su novia, que le dio el «sí quiero». Fue el día perfecto para Patrick Lange. Patrick Lange, en el momento que le pide matrimonio a su novia - EFE Muchas miradas estaban puestas en Javier Gómez Noya, que finalizó en undécima posición en una competición que disputaba por primera vez y que ansiaba con ganar. Su inicio fue prometedor. Acabó el trayecto a nado en quinta posición, pero exprimió demasiadas energías en la bicicleta. Unas energías que echó en falta en el trayecto a pie, donde solo pudo aguantar el ritmo de Lange durante 15 kilómetros. «No hice la carrera soñada, por lo que estoy decepcionado. Pero al menos he aprendido muchas cosas y trabajaré duro para hacerlo mejor la próxima vez», afirmó entristecido el español. De los errores se aprende y el gallego nunca se rinde. Él está deseando que llegue la próxima edición.