Tarifas: así podés aislar tu casa del frío sin gastar un peso en luz y gas
El mes de julio llegó junto a un nuevo cuadro tarifario de los servicios básicos. Estos rigen tanto en Capital como en el Conurbano. Con la reducción de los subsidios, la energía aumentó un promedio de 17% mientras que en el caso del gas, la suba es del 20%.
Alrededor del 40% de la energía que se consume en Argentina corresponde a los espacios habitables, como lo son: las viviendas, los comercios, las oficinas, hospitales, entre otros. En ellos, el gas natural equivale a un 57% y la electricidad, a un 35%. No obstante, se debe considerar que gran parte de las viviendas argentinas tienden a perder calor en:
techos
pisos
paredes
ventanas
Sin embargo, no es necesario utilizar gas o grandes cantidades de electricidad para calentar la casa. Existen varias alternativas que hoy en día permiten crear dispositivos caseros que calientan la casa de forma segura y mucho más barata que mediante estufas de gas o calefactores eléctricos.
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HACERLE FRENTE AL FRÍO INVERNAL
Muchos usuarios tratan de reducir luz y gas, en un intento de moderar el consumo para no tener que pagar tanto a fin de cuentas. Existen varias formas de hacerlo; sin embargo, la más eficiente de todas es la aislación térmica en viviendas y edificios, ya que este permite bajar drásticamente el consumo energético.
AISLANDO LAS VIVIENDAS
De acuerdo al Ministerio de Energía: dentro de los hogares se calcula que el 50% del consumo lo genera la climatización de la vivienda, sea invierno o verano. Un 25% corresponde a los artefactos del hogar y el otro 25%, al agua caliente.
Lo que sí, es que se asegura un ahorro distintivo. Donde el aislante térmico te permite ahorrar un 35% en el consumo de energía para climatizar un hogar, lo que equivale a un 70% menos en las facturas de la luz y el gas.
CALEFACCIÓN CON MACETAS
Es un sistema que aprovecha el material del cual están hechas las macetas para poder calentar la casa de una forma eficiente, ya que las mismas suelen calentarse mucho y distribuir la energía de forma muy eficiente con fuentes de calor muy bajas.
La maceta hay que colocarla sobre algún tipo de base del mismo material (para que resista el calor) pero que tenga una forma rectangular. Luego se colocan velas en su interior y se pone una maceta dada vuelta, lo que permitirá tener una fuente de calor que dure varias horas.
El problema de este método está en que la base suele calentarse mucho en el proceso, por lo que sí está colocada sobre un mueble lo más seguro es que termine dañándose por el calor.
CALEFACTOR ELÉCTRICO MINI
Funciona por medio de un cable de resistencia que soporte 1000W junto con 220 V -además debe ofrecer una resistencia de entre 55 y 60 ohmios-.
Por otro lado, se necesitarán una lata de atún pequeña, mezcla de cemento, un voltímetro, un enchufe, un cable y un taladro para hacer agujeros a la lata de atún. Con todo esto solo toca dos secciones pequeñas de la resistencia, hacer dos agujeros a la lata donde se montará el enchufe, mezclar el cemento e introducirlo en la lata.
Por último, se debe cablear las dos secciones de la resistencia al enchufe y cuando se conecte a la corriente esta se pondrá roja generando calor. Se debe tener cuidado ya que la resistencia aumenta mucho su temperatura, mientras que también se debe contar con un extinguidor cerca ante cualquier problema que surja.
CALEFONES SOLARES
Otra estrategia de consumo eficiente de energía es la instalación de calefones solares y artefactos sin piloto, pero que sólo bajan un 18% el consumo de energía. También el uso de los artefactos eléctricos y/o gasodomésticos (electrodomésticos de Clase A) y lámparas LED, que permiten ahorrar únicamente un 9% en el consumo.