La gran renuncia inmobiliaria: el 76% de los compradores descarta su zona preferida por los altos precios y la escasa oferta
Comprar una casa en España se ha convertido, para la mayoría, en un ejercicio de renuncia. El primer y mayor sacrificio es la ubicación. El sueño de vivir en el barrio deseado, cerca del trabajo, la familia o los servicios, se estrella contra la realidad de unos precios desbocados y una oferta insuficiente. Los datos son claros: tres de cada cuatro compradores (76,5%) se ven forzados a buscar en zonas que no eran su primera opción, según un estudio de la Federación de Asociaciones Inmobiliarias (FAI).
El informe detalla que el 39,45% de los compradores potenciales desiste de encontrar una vivienda que se ajuste a sus necesidades por el precio, mientras que el 37,07% abandona la búsqueda directamente por la falta de oferta en el mercado.
El estudio de la FAI también define al potencial comprador de vivienda en 2025: una pareja con una edad media de 41,8 años y con hijos, que busca un piso familiar cerca de su entorno, con un presupuesto entre 150.000 y 250.000 euros y que necesita financiación.
La compra para primera residencia es la más común, representando el 57,1% de las operaciones. La compra para invertir supone el 24%, y para segunda residencia, el 18%.
Casi la mitad de los compradores (48,8%) ya son propietarios que cambian de casa. Los inquilinos que dan el paso a comprar son el 25,8%, y quienes adquieren su primera vivienda por emancipación, el 25,4%.
El perfil sociodemográfico revela una tendencia clara: acceder a la vivienda en solitario es cada vez más una excepción. Los compradores individuales apenas representan el 16,8% de las operaciones. Este dato contrasta con el claro predominio de las economías familiares conjuntas. Las parejas con hijos protagonizan el 41,2% de las compras, y las parejas sin hijos, el 36,6%.
Esta distribución evidencia que los elevados precios del mercado convierten la suma de ingresos, tradicionalmente en una pareja, en un requisito casi indispensable para aspirar a una hipoteca, marginando a quienes buscan comprar por su cuenta.
Además, la FAI indica que, en cuanto a financiación y según las compraventas realizadas en agencias, siete de cada 10 clientes recurren a la hipoteca, ya sea combinada con ahorro personal (58,4%) o con apoyo familiar (14%); y solo una cuarta parte (27,63%) paga al contado.
