Tras su ruptura con el cantante Álvaro de Luna , Laura Escanes se está replanteando muchas cosas en su vida. Aunque ninguno de los dos ha querido desvelar los motivos que les llevaron a tomar esa decisión, según el círculo cercano asegura que estaban en «momentos vitales diferentes» y la catalana tenía una prioridad, su hija Roma. La influencer ha querido ir más allá y ha compartido con sus seguidores una dura reflexión que le preocupa. «Siento que con la edad que tengo... 27... estado civil: divorciada, una hija... siendo conocida y la poca privacidad que hay a veces... siento (aunque para mi no es así) que esas mochilas que forman parte de lo que soy y de mi vida... pesaran siempre mucho a cualquier persona que se acerque a mi«, comenzaba diciendo el mensaje. Noticias Relacionadas El 'palo' de Jordi Cruz a Ada Colau, su elogio a Ayuso y el motivo por el que no abre un restaurante en Madrid María Carbajo Pilar Vidal habla de su primera vez en Sálvame: «No me he medicado más que en mi primera noche del Deluxe» David Sánchez de Castro Laura Escanes y Risto Mejide estuvieron juntos siete años y tuvieron una hija llamada Roma. En septiembre de 2022 decidieron separarse y poner fin a su matrimonio : «Yo era muy feliz, pero llegó un momento que no nos hacíamos felices, ni yo a él ni él a mí. Creo que la diferencia de edad no es un problema si estás en el mismo momento vital. Creo que no es la diferencia sino el momento vital. ¿Qué pasa? Que la diferencia de edad y el momento vital están muy relacionados «, reconocía hace unos meses. La joven confiesa en su reflexión que su situación «asusta y huyen para no complicarse la vida». Laura reconoce que «quizás es mejor con alguien que no haya tenido hijos, porque ya vengo quemada... Yo que sé. Y lo entiendo», trataba de explicar a sus seguidores. Publicación Laura Escanes instagram « Una reflexión sin más « que en más de una ocasión ha compartido con amigas suyas en situaciones similares y que está segura de que muchas de sus seguidoras también han sentido alguna vez. »Aparece nuestra amiga llamada culpa en mi cabeza y me hace sentir pequeña y en fin, la vida. Cuando consigo localizar a esa vocecilla que me intoxica, soy consciente de la suerte que tengo. Pero bueno, esto es una realidad de lo que siento a veces como mujer separada, con una hija y haciendo su camino . Siempre pa´rriba, aunque a veces cueste«, ha terminado diciendo.
