Escándalo sexual en Hollywood: la grave denuncia de Sharon Stone a un productor
Sharon Stone compartió aberrantes detalles sobre su experiencia en el set de la película "Sliver".
La icónica actriz Sharon Stone, de 66 años, compartió detalles impactantes sobre su experiencia en el set de la película "Sliver", destacando la presión que enfrentó para tener relaciones íntimas con su coprotagonista Billy Baldwin, con el objetivo de mejorar la "química" en la pantalla.
Stone reveló la controvertida situación durante el episodio más reciente del "Louis Theroux Podcast" de Spotify. La estrella, que ya había discutido situaciones similares en sus memorias de 2021, "La belleza de vivir dos veces", identificó al fallecido productor Robert Evans como la figura detrás de estas presiones en el set de Sliver, un thriller de 1993.
Según Stone, Evans la llamó a su oficina para discutir la química en pantalla con Baldwin, instándola a tener relaciones íntimas con él. En el pódcast, Stone recordó las palabras de Evans, quien le dijo que "si me acostaba con Billy Baldwin, la actuación de él mejoraría, y necesitábamos que Billy mejorara en la película, porque ese era el problema".
La actriz describió la conversación como una experiencia incómoda y absurda, resaltando que la responsabilidad recaía en ella para mejorar la calidad de la película. Stone afirmó que Evans sugirió que su propia actuación estaba afectando negativamente la producción, y la solución propuesta era tener relaciones íntimas con Baldwin.
Además, Stone recordó que Evans ignoró sus sugerencias de otros actores para el papel y persistió en elegir a Baldwin. Este incidente no fue único en su carrera, ya que Stone reveló otros casos similares en sus memorias, destacando la constante presión en la industria del cine.
Estos relatos ofrecen una perspectiva cruda sobre la discriminación de género y la presión indebida que algunas actrices enfrentan en la industria cinematográfica. La actriz concluyó su historia reiterando que su trabajo es actuar, no comprometerse con situaciones incómodas para satisfacer las expectativas de otros en la industria.