Realmente no es fácil lograr todo lo que estos años está logrando el
Barcelona femenino y esa dificultad se hizo patente en el partido de vuelta de cuartos de final, frente al
Brann. El conjunto noruego ya debió haber sido goleado en la ida pero resistió y la vuelta fue un calco. El Barcelona dominó, atacó, las encerró en su área y tuvo ocasiones para golear. Pero no atinó entre los tres palos y el
Brann se hizo el muerto para jugar sus bazas en el último cuarto de hora, al que sus jugadoras llegaron más entereza que las azulgranas.
Aitana, con un golazo, y
Rolfö tras un jugadón de
Graham pusieron por delante a las azulgranas, pero cuando todo parecía hecho
Svendheim acortó distancias y logró que el tramo final de partido se hiciese muy largo a las de
Giráldez, hasta que Patri Guijarro, en los minutos finales, acabó de liquidar partido y eliminatoria.
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