Así filtra el Gobierno de Pedro Sánchez las atenciones a la prensa: pocas preguntas y la primera, la de la Sexta

Decía el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , que se había tomado un descanso por la situación insoportable que vive su entorno familiar y entre los culpables de esa presión que está afectando gravemente a sus seres más queridos señalaba a cierta prensa. La sociedad española sigue esperando conocer las medidas para la « regeneración democrática « que dice que necesita este país y que anunció que pondría en marcha de manera inmediata; dejando entrever que los medios de comunicación están en la diana. Sin embargo, ministros de su máxima confianza como Félix Bolaños ya aplican técnicas para controlar a la prensa, esquivando sus preguntas incómodas y colando mensajes triunfalistas a las puertas de unas elecciones como las Europeas y con la resaca aún del parón temporal de Pedro Sánchez. No son los primeros que lo hacen, pero llama la atención cuando se trata del mismo Gobierno que apunta sin miramientos a los medios. Bolaños está este jueves de visita institucional en Sevilla. Desde el ministerio que dirige se convocó a los medios a las 12.30 en el rectorado de la Universidad Pablo de Olavide. En la convocatoria se informaba sólo que se iba a atender a los medios, sin más. A la hora acordada, un buen número de periodistas esperaba al ministro. Fue entonces cuando alguien de su equipo informó que sólo se iban a admitir tres preguntas. Tras las quejas de algunos periodistas, los más veteranos, se admitió que fuera alguna más. Eso sí, que fueran sólo tres los periodistas que intervinieran. «Esto es un canutazo no una rueda de prensa», argumentan. Entonces, ¿para que convocan? Oda a Sánchez y duro con Ayuso También en ese momento se comunicó a los informadores que el primer medio en intervenir iba a ser la Sexta porque estaba emitiendo en directo. Las pocas cuestiones que pudieron preguntar a los periodistas, las conoció el ministro antes de ponerse delante de los micros; lo que facilitó la preparación previa del político al que pudieron cocinarle las respuestas. La atención a los medios arrancó, tal y como habían programado, con una pregunta sobre la era del Sanchismo y la celebración del 2 de mayo, que es festivo en la comunidad de Madrid, pero que aquí en Andalucía tiene la misma relevancia que un 4 de septiembre; es decir, ninguna. Fue el momento para que Bolaños pudiera hacer una oda con conexión en directo al presidente y arrearle a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso: «Madrid es una región con ciudadanos tolerantes, hospitalarios, amables, educados, comprometidos, solidarios...virtudes que, en ocasiones, echamos de menos en los gobernantes de Madrid y por eso cada día están más solos«. Una de esas periodistas veteranas consiguió colar las dos únicas preguntas que tenían interés para la actualidad andaluza. Por un lado, le preguntó por las medidas que iba a llevar a cabo el Ministerio de Justicia de cara a la situación tan preocupante que se vive en la costa gaditana y malagueña por culpa del narco y si los jueces están siendo presionados por estas mafias a tenor de algunas decisiones judiciales incomprensibles como la puesta en libertad provisional reciente del líder de la Mocro Maffia. Sobre la primera cuestión salió alabando el plan que había puesto el Ministerio del Interior, en el Campo de Gibraltar, «nos felicitan todos por ello»; obviando que también su gobierno desmanteló en 2022 los equipos de investigación de la Guardia Civil que estaban obteniendo buenos resultados policiales. Cuando la periodista le pidió que se centrara en las medidas del Ministerio de Justicia, que es el departamento de Bolaños , le valió cierta reprimenda del político: «Si no me interrumpe más y me deja explicarme». El mensaje por encima de todo. El ministro se marchó de la comparecencia entre las peticiones de varios periodistas de ahondar en algunas de esas cuestiones, haciendo caso omiso así a las instrucciones que había dado su equipo. Pero fue en balde, no hubo respuesta alguna.