Rusia acusa a Estados Unidos de incitar "ataques terroristas" contra el sistema energético de la UE y TurkStream
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ofreció una conferencia de prensa en la que reveló la postura de Moscú frente a la situación geopolítica actual, destacando la percepción de Estados Unidos y la Unión Europea, así como la situación en Ucrania.
Durante la conferencia, Lavrov no escatimó en críticas hacia Estados Unidos, a quien calificó de "delusional" en su enfoque sobre la política global. Además, se refirió a la Unión Europea como "humillada", sugiriendo que la región ha perdido su autonomía en la toma de decisiones frente a la influencia estadounidense. Por otro lado, el ministro ruso también se refirió a Ucrania, tildándola de "terrorista".
Estados Unidos incita "ataques terroristas"
"Ellos (Estados Unidos) de manera precipitada dieron luz verde para perpetrar ataques terroristas que destruyen el bienestar energético de la UE y ahora incitan a los clientes ucranianos a destruir también el TurkStream”, dijo el diplomático quien también calificó a la Unión Europea como "humillada", argumentando que las decisiones de Bruselas están dictadas por los intereses de Estados Unidos.
Además, Lavrov se refirió a Ucrania como un "estado terrorista", justificando así las acciones militares de Rusia en el país. El ministro argumentó que las acciones de Ucrania ponen en peligro la seguridad de la región, lo que, según él, justifica la respuesta de Moscú.
Al respecto de los gasoductos construidos para transportar combustible ruso por debajo del mar Báltico hasta Alemania y que fueron destruidos por explosiones, Rusia señala a Estados Unidos como el único beneficiado. De acuerdo con lo recogido por RT, Moscú explica que gracias a este ataque, el gigante americano acaparó el mercado europeo del gas natural licuado.
TurkStream entre los actos "terroristas" de Estados Unidos
El gasoducto TurkStream es un proyecto real y se encuentra operativo desde principios de 2020. El gasoducto conecta Rusia con Turquía, pasando por el mar Negro, y tiene como objetivo asegurar el suministro de gas natural a Turquía y a otros países de Europa. Fue desarrollado principalmente por Gazprom, la empresa estatal rusa, y Botas, la empresa turca de energía.
Según las últimas declaraciones del ministro Lavrov, este gasoducto es uno de los principales objetivos de ataque por parte de Ucrania, en respuesta a las provocaciones de Estados Unidos.