Llegaba con una gran sonrisa para tratar un tema que ya 'contrató' con Sonsoles Ónega hace una semana: cómo combatir las manchas de la ropa que salen por el uso de la lavadora. En plató, un electrodoméstico inmaculado, a estrenar. Ella, con su uniforme blanco y radiante, sus guantes y su carro de limpieza. Junto a ella, la presentadora y Ana Obregón, que hoy participaba como tertuliana en ' Y Ahora Sonsoles ' (Antena 3). Y listo, ¡manos a la obra! La Ordenatriz comenzaba su intervención: 'Combatir las manchas de la lavadora'. Begoña Pérez , que es quien está tras este nombre, apuntaba que la suciedad del cajetín y lo que se acumula en la goma del tambor son los principales enemigos, así que ha empezado su intervención. Ella ha explicado que en el cajetín se genera moho del jabonería, del agua y la humedad, y hay que darle fuerte con estropajo y jabón. Respecto a las gomas similar, para lo que ha dado otro consejo especial. Las gomas, refería, necesitaban lejía, reposo y tiempo. «Sin quitar las gomas, ojo, Ana», le refería a Obregón que insistía en quitar las del tambor. «Eso solo con un especialista. Para limpiarlas nosotros en casa se toma un trapo que se tenga viejo, se mezcla agua y lejía y se impregna bien ese paño. Se dejará reposar hasta 24 horas ahí, en las gomas, para que quede bien limpio. Recordemos que, de hecho, la lejía actúa a partir de los 10 minutos que se empieza a usar», ha aclarado La Ordenatriz . El tercer punto de la discordia es el filtro , que también hay que limpiarlo. Se quita y se da con un estropajo, agua y jabón para eliminar la suciedad que se haya podido acumular y que la final acaba por estropear la ropa. Ante esto, Sonsoles Ónega, que llevaba ya unos minutos murmurando y 'protestando' entre bromas , ha terminado diciendo que todo eso era demasiado. Es aquí que La Ordenatriz ha alzado la voz y ha terminado diciendo: «¡Me hundís siempre el programa! Vengo porque tengo la autoestima muy alta pero me hundís siempre… ¡Me hacéis bullying !». Sonsoles y Ana han reído el comentario pero La Ordenatriz, llegado ese punto, no sabía si reír o llorar. Ella ha seguido con sus explicaciones, eso desde luego, dando buena muestra de su profesionalidad, y ha añadido otro punto clave para conseguir que las prendas salgan perfectas de la lavadora: «no llenarla en exceso. Es decir, si es de siete kilos, no meterle diez de ropa, que cuando se suma el agua al final hasta te puedes terminar cargando el electrodoméstico».