El macroparque de ecoturismo y aventura que el grupo Toroverde proyecta en la Serranía de Cuenca ha modificado su planificación hídrica para reducir el impacto sobre los acuífero s. El promotor ha actualizado la solicitud de concesión de aguas ante la Confederación Hidrográfica del Júcar, limitando la captación exclusivamente al abastecimiento humano y apostando por agua regenerada para otros usos. El Proyecto de Singular Interés (PSI) del parque de ecoturismo y aventura ha introducido, así, cambios relevantes en su planteamiento en materia de agua, un factor clave tanto desde el punto de vista ambiental como administrativo. La empresa promotora ha presentado una modificación del Anexo 6 del documento técnico, relativo a la solicitud de concesión de aguas subterráneas , con el objetivo de ajustar la localización de los sondeos y concretar los usos previstos. Según la documentación remitida a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), el proyecto contempla ahora la captación de agua subterránea exclusivamente para abastecimiento humano, tanto del parque como del hotel y la zona comercial asociada. Así, quedan expresamente excluidos de esta concesión otros usos, como el riego de zonas verdes o los sistemas de protección contra incendios, que se abastecerán mediante agua regenerada procedente de una estación depuradora propia proyectada para el complejo. El volumen máximo solicitado, como se desprende del PSI, asciende a 179.985 metros cúbicos anuales, una cifra que, según la memoria técnica, se sitúa dentro de las reservas previstas para nuevos desarrollos turísticos en esta zona de la cuenca del Júcar. La captación se realizará a través de dos sondeos, ambos ubicados en el término municipal de Mariana y a más de 500 metros de otros pozos y manantiales existentes, una de las condiciones habituales para minimizar afecciones a terceros. La planificación del consumo está ligada al desarrollo por fases del proyecto. En su configuración final, el parque prevé alcanzar hasta un millón de visitantes anuales , además de un hotel integrado en el entorno con 240 habitaciones y una zona comercial asociada. Incluso las atracciones acuáticas previstas, como un río lento, funcionarán con sistemas de recirculación, limitando el consumo al llenado inicial y a las pérdidas por evaporación y mantenimiento. Más allá del dato técnico, la modificación del planteamiento hídrico se interpreta como un movimiento clave para blindar el proyecto desde el punto de vista ambiental y administrativo , en una provincia especialmente sensible a la gestión del agua. La supervisión de la CHJ, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, convierte este aspecto en uno de los filtros decisivos para la viabilidad del desarrollo. El ajuste en el uso del agua marca así el primer gran hito de un proyecto llamado a transformar el modelo turístico de la Serranía de Cuenca . Declarado de Singular Interés por el Gobierno regional, el parque de Toroverde se concibe como una inversión de largo recorrido, con impacto potencial en el empleo, la economía local y la ordenación del territorio. Como desvela la documentación, ahora en periodo de alegaciones, el proyecto contempla en el área más próxima al acceso principal del parque y ya en lo alto de la sierra una villa concebida «como un conjunto armónico de edificaciones de baja altura que dialogan con la topografía del terreno. Lejos de imponerse al paisaje, las construcciones se integran de manera natural en el entorno, configurando un espacio acogedor y funcional que actúa como puerta de entrada a la experiencia del parque». En este área se ubicarán las principales zonas de recepción de visitantes, así como restaurantes, tiendas y un auditorio al aire libre pensado para acoger actividades culturales y eventos. Además, han proyectado una torre mirador «como un punto privilegiado desde el que contemplar la sierra y reforzar el vínculo entre arquitectura y naturaleza». Dentro de este mismo espacio abrirá sus puertas el centro de eventos con acceso independiente , lo que permitirá a la empresa gestionar estas instalaciones de manera autónoma. Este espacio contará con un área de convenciones. En cuanto al alojamiento de los visitantes, se apuesta por la construcción de alojamientos alejados del epicentro del parque, con el objetivo, aseguran, de ofrecer una experiencia de descanso «auténtica y en plena conexión con la naturaleza». La propuesta hotelera se materializará en un hotel de aventura con dos tipologías de alojamiento : cabañas de madera «de alto nivel», y una opción más aventurera que recreará la experiencia de vivir en una caravana «sin renunciar a las comodidades esenciales».