Orban explica que la entrada de Ucrania en la UE dará mucho peso a Washington en Europa
La oposición del primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, a la entrada de Ucrania en la Unión Europea se debe a que considera que alteraría el equilibrio político y aumentaría la influencia de Estados Unidos, según asegura el portal de investigación Direkt36.hu citando fuentes anónimas. Esa fuente señala que Orbán planteó esas reticencias en una reunión que mantuvo la pasada primavera con diputados gubernamentales y de la oposición. "Habló de que la adhesión de Ucrania a la UE alteraría el equilibrio de las relaciones de poder en la UE, mientras que EEUU adquiriría demasiada influencia en la región", asegura el prestigioso portal informativo, que cita fuentes con conocimiento de ese encuentro.
El Gobierno de Orbán ha expresado varias veces su rechazo a la integración de Ucrania, argumentando la "precaria" situación de las minorías étnicas y la corrupción en el país. En la última cumbre de los Veintisiete, en diciembre de 2023, Orbán finalmente no votó en contra del inicio de negociaciones de adhesión de Ucrania, mediante la fórmula de abandonar la sala mientras el resto de líderes aprobaban la propuesta.
En la reunión citada por Direkt36,hu, Orbán informó a los presentes que -según informaciones de servicios secretos- EEUU prometió a Ucrania en la primavera de 2023 que la UE aceleraría las negociaciones de adhesión. Según Orbán, prosigue el artículo, todo esto significa "un riesgo geopolítico" ya que con Ucrania en la UE se crearía un "centro de fuerza" en Europa dominado política, económica y militarmente por EEUU.
Este eje estaría formado por Polonia, los países bálticos, Ucrania y, en parte por Rumanía, o sea los países más temerosos de un ataque ruso y que mantienen relaciones especialmente estrechas con EEUU.
Direkt36,hu recoge que Orbán afirmó en la reunión que Francia y Alemania rechazaron una propuesta húngara de acercar el grupo de Visegrado (Hungría, Polonia, Eslovaquia, República Checa) al eje franco-alemán para así "consolidar el Este europeo".
Según el primer ministro, Alemania ve a Visegrado como un rival y por eso la UE ha iniciado procesos de infracción contra Hungría y Polonia por violar las normas comunitarias y el Estado de derecho.
Orbán es considerado entre todos los líderes comunitarios como el mejor aliado de Moscú y se opone a las sanciones contra Rusia, a pesar de haber aprobado hasta ahora todos los paquetes punitivos.