¿Cuáles son las competencias de tráfico que se traspasarían a Navarra?

Siete ámbitos de actuación habrían pasado a depender de la Administración navarra y la Policía Foral si el Supremo no lo hubiese anulado

El traspaso de las competencias de tráfico de la Guardia Civil a Navarra para que sean asumidas por la Policía Foral y la Administración regional del norte de España ha sido anulado este lunes por el Tribunal Supremo.

Una descentralización de las competencias para la comunidad autónoma que ahora queda en el aire. La Comunidad Foral si finalmente las mantiene tendría que encargarse desde de la tramitación de las multas o la gestión de las autoescuelas a la impartición de educación vial a los ciudadanos y la generación de estadísticas sobre el tráfico.

El TS dijo que no son unas competencias que se puedan ceder a través de un real decreto del Gobierno. Eso sí, puntualiza, se podría hacer este cambio competencial con arreglo a la ley si Navarra reforma su estatuto de autonomía, conocido como Lorafna, o bien con la aprobación de una ley orgánica, tal y como establece el artículo 150.2 de la Constitución.

En su reacción tras conocer la decisión judicial el Ejecutivo regional de la socialista María Chivite ha anunciado que procederá a "articular el mecanismo necesario" para poder continuar con su "compromiso de avanzar en el autogobierno", como ocurriría con la asunción de este nuevo ámbito competencial.

Según el contenido del acuerdo con el que el Gobierno de Sánchez y el navarro trataron de transferir las competencias, según recoge EFE citando datos facilitados por el departamento de Presidencia Función Pública e Interior de Navarra, son siete áreas de actuación concretas las que se verían afectadas por el cambio.

Sancionar

Se cedería la competencia sancionado que se concreta en la gestión de miles de denuncias al año que pueden proceder de diferentes vías (agentes de cuerpos policiales a sistemas automatizados de control de la circulación) y requerir diferentes actuaciones finales (abono de la sanción, anulación y quita de puntos del carné de conducir).

Autoescuelas y reconocimientos médicos

Asumiría la Comunidad Foral la responsabilidad sobre la formación de la ciudadanía en la obtención de los permisos de conducción y su renovación. Lo primero, en las autoescuelas, y lo segundo, en los centros sanitarios que realizan reconocimientos médicos. La gestión de ambas actividades dejaría de ejercerla la Jefatura de Tráfico del Ministerio de Interior y pasaría a la del Gobierno Foral.

Los puntos del carné

Correspondería a la administración de Navarra determinar la forma en la que se debe impartir y el contenido de los cursos de sensibilización y reeducación vial. Esto también implicaría que decidiesen su duración y los requisitos para su superación.

Educación vial

El traspaso de las competencias también supondría que el Gobierno de Navarra debiera encargarse de la convocatoria y desarrollo de los cursos que otorgan el Certificado de Aptitud de Profesor y Formación Vial, así como el planeamiento y ejecución de campañas divulgativas dirigidas a la educación y formación vial de la sociedad navarra. Desarrollaría, paralelamente, la estrategia de Seguridad Vial y Movilidad que marcarán el futuro, así como un Currículo Navarro de Seguridad Vial.

Vigilancia y controles de tráfico

Sería necesario en este ámbito la convivencia entre Policía Foral y Guardia Civil durante un tiempo transitorio hasta que las funciones serían desempeñadas en exclusiva por Policía Foral con la ejecución total de la trasnfetencia. Se prevé que el cuerpo policial regional precise la incorporación de alrededor de 149 nuevos efectivos que se sumarán a los 226 miembros que actualmente forman parte del Servicio de Tráfico de Policía Foral. Previamente a la incorporación de estos refuerzos humanos, se activaría un sistema voluntario de paso de miembros de la agrupación de tráfico de la Guardia Civil en Navarra a la Policía Foral.

Los miembros de la agrupación de tráfico de la Guardia Civil en Navarra que no pasasen a la Policía Foral serían o bien recolocados en otros servicios de la Guardia Civil en Navarra o bien destinados, si así lo solicitasen, en otras partes del país. En todo caso, según recoge la citada agencia de noticias, se garantizaría que ningún Guardia Civil saliera de manera no voluntaria como consecuencia de la implementación de la transferencia.

Los otros dos asuntos: pruebas deportivas y estadísticas

El Gobierno de Navarra y su cuerpo funcionarial asumirían la responsabilidad de vigilar, asegurar la seguridad y coordinar el dispositivo policial en pruebas deportivos o marchas ciclistas que se celebren en la región. Asimismo, la recopilación de datos, su tratamiento y la publicación periódicamente y en tiempo real de estadísticas de accidentes y estado del tráfico.