La "Polinesia francesa" de España que puedes visitar este verano sin salir del país

Esta isla española cuenta con atractivos que no se pueden ver en ningún otro lugar y con algunas de las playas más impresionantes y bonitas del mundo

La cultura, historia y gastronomía de España, entre otros factores, hacen que nuestro país sea el segundo más visitado del mundo. El turismo internacional queda fascinado y cada vez son más las personas extranjeras que visitan nuestros pueblos y ciudades gracias a todo lo que ofrece. Entre ello, también están sus paisajes, alabados por grandes medios, universidades y organizaciones como The Telegraph, Harvard o la OCU. Así, en territorio español se puede encontrar la conocida como "Polinesia francesa" española, un destino para las vacaciones de verano sin salir de la nación.

Aunque no sea un destino que esté dentro de la Península, es de España. Concretamente, se encuentra en las Islas Baleares. Así, entre estas tierras situadas en el Mediterráneo se encuentra Formentera, que junto a Ibiza conforma las Islas Pitiusas es conocida como la "Polinesia española". Es la isla habitada más pequeña de este territorio, pues posee poco más de ochenta kilómetros cuadrados. Pero sus aguas cristalinas, ambiente y arenas blanquecinas hacen de Formentera un destino imprescindible de visitar y con un encanto único.

Formentera tiene una rica historia y cultura, que se refleja en sus pintorescos pueblos, antiguas torres de defensa y yacimientos arqueológicos. También alberga varios festivales y eventos culturales de gran importancia, pero quizás, lo más llamativo son sus playas paradisíacas.

Por qué Formentera es conocida como la "Polinesia francesa" de España: qué hacer, playas, paisajes...

Cuenta así con algunas de las playas más impresionantes del Mediterráneo, como Ses Illetes, considerada una de las mejores playas del mundo, y Espalmador, una isla deshabitada accesible en barco desde Formentera. En definitiva, es un destino idílico para aquellos que buscan disfrutar de la belleza natural, la tranquilidad y el estilo de vida mediterráneo.

Casi una veintena de rutas verdes recorren la isla sin apenas pendientes y con recorridos accesibles para todos, y es que gran parte de Formentera está protegida como reserva natural. Los visitantes pueden explorar sus dunas de arenas, lagunas, higueras, las sabinas y los almendros protagonizan el hermoso paisaje austero de Formentera.

Esta isla tiene alrededor de 12.000 habitantes censados, pero se multiplican por cuatro durante la época estival. Aunque en julio y agosto las concurridas playas pierdan un ápice de pureza, no se trata de la agobiante masificación de otras áreas peninsulares. A Formentera tan solo se puede acceder en barco, pero desde Ibiza tan solo se tarde media hora.

Cerca de su imponente faro de La Mola, donde se encuentra una de las zonas más altas de la isla, también es posible encontrar un pequeño monolito dedicado al gran escritor francés Julio Verne, quien en una de sus obras (Héctor Servadac), menciona a este lugar.