¿Cómo se alcanzó el acuerdo para el nuevo hospital de Cartago? Uno de los directivos de la CCSS responde

Con seis votos a favor y tres en contra, los representantes patronales y sociales decidieron avanzar con la construcción del nuevo hospital de Cartago pese a la oposición del gobierno.

Este miércoles 22 de mayo, los representantes del Poder Ejecutivo en la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) perdieron un pulso en el que tienen meses enfrascados. Con una votación de seis a favor y tres en contra, la entidad decidió adjudicar la construcción del nuevo hospital de Cartago a una constructora mexicana por $314 millones.

La decisión, apoyada por los tres representantes patronales y los tres representantes laborales, es un revés para Marta Esquivel, presidenta ejecutiva de la CCSS. La jerarca lleva meses expresando que el terreno comprado desde 2011 en El Guarco para levantar el nuevo Max Peralta, no cumple con las especificaciones técnicas y que existen fallas geológicas que amenazarían el proyecto.

José Luis Loría, representante de las cooperativas en la Junta Directiva de la CCSS, conversó con La Nación sobre cómo se reunieron los votos necesarios para avanzar con la obra.

- ¿Cómo se construyó el acuerdo con los representantes de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep) para lograr la adjudicación de la construcción?

- Este acuerdo empezó a construirse hace mucho tiempo, primero juntamos a las fuerzas vivas de Cartago con las Juntas de Salud para promover medidas de presión. Luego, los diputados de Cartago de diferentes bancadas dieron seguimiento al tema y, además, los representantes del sector social en la Junta Directiva tratamos de conciliar con los representantes de Uccaep, que era fundamental, porque necesitábamos asegurar seis votos.

“El acuerdo logró construirse la semana pasada, este es un tema de importancia nacional, pues se trata de la salud de miles de cartagineses. El edificio actual tiene más de 114 años de haberse construido y las condiciones son precarias. Este asunto era una urgencia”.

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- ¿Cuáles fueron los criterios para votar a favor de la construcción del nuevo centro médico?

- El terreno comprado para el hospital de Cartago es, quizá, el inmueble más estudiado del país. Tiene estudios profundos de suelo, análisis geológicos, ha estado involucrada la Municipalidad de Cartago, la Secretaría Técnica Nacional Ambiental, el Ministerio de Salud, el INVU (Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo) y muchos otros actores institucionales, se cumplió con todos los requisitos.

“Incluso, el ministro de Ambiente, Franz Tattenbach, como cabeza de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental, ratificó el mes pasado la viabilidad ambiental. Así las cosas, el terreno es viable y correspondía decidir sobre la licitación.

“También es importante decir que la Auditoría Interna de la Caja revisó todo el proceso de compra y de elaboración de estudios y dijo que todo estaba a derecho”.

- ¿Por qué se demoró la decisión?

- Como todos sabemos, el gobierno puso todos los obstáculos imaginables a la construcción del nuevo hospital de Cartago, incluyendo una narrativa sobre el terreno que no era razonable, pues el inmueble cumplía con todos los criterios técnicos.

“Este fue un proceso muy desgastante, de casi dos años. Fue un pulso por una intromisión muy grosera del Poder Ejecutivo en un asunto que era propio de la Junta Directiva, una participación muy beligerante de la presidenta ejecutiva, Marta Esquivel, apoyando las tesis del gobierno y en medio de todo eso la población de Cartago urgida por el hospital.

- La ministra de Salud, Mary Munive, declaró semanas atrás que no daría la habilitación al centro médico si se construía en El Guarco ¿Eso le preocupa?

- Eso es una cosa absurda, porque los hospitales se habilitan cuando ya están terminados, cuando ya van a empezar a funcionar y eso será hasta el 2028 y yo no sé si ella piensa seguir siendo ministra en el 2028, su periodo acaba en 2026.

“(...) Es importante aclarar que, en esta etapa, el Ministerio de Salud no puede intervenir. Ahora entran otros actores, como la Contraloría General de la República, que revisará eventuales apelaciones de la adjudicación, pero eso es un proceso normal.

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- ¿Hubo alguna negociación entre ustedes y Uccaep de cara a futuros proyectos? ¿Algún compromiso de votar de cierta forma en futuras discusiones?

- Para ser transparente, debo decir que no, no hubo nada transaccional o de intercambio en esta negociación, todo lo que se discutió estaba basado en el interés público de contar con el hospital.

- Hasta hace algunos meses, usted era un directivo suspendido por decisión del Gobierno y ahora forma parte de la articulación de este acuerdo ¿Qué representa esto para usted?

- Fui suspendido junto a otras dos directivas de manera ilegal por más de seis meses, tuvimos que acudir a la Sala Constitucional para ser restituidos y si no nos hubieran restituido es probable que hoy no hubiera acuerdo para avanzar con el hospital de Cartago (...) Hasta que nosotros regresamos fue que se retomó este asunto y otros relacionados con el portafolio de inversiones de la entidad.