A Nole Djokovic lo han echado del US Open por tonto. Vale, por tonto y por tener la mala suerte de dar un pelotazo a una juez igualita a Marya Kalesnikava, la opositora bielorrusa secuestrada en la calle. Un cabreo tras un break y pelotazo a la garganta. Djokovic, inmenso tenista y lila por sus actos. Lo mismo organiza un torneo pro-Covid (y lo pilla) que se deja captar por un gurú español para la «religión del amor». El gurú es de justificar los arrebatos de Nole. Por ejemplo, cuando rompe una raqueta. Читать дальше...